Tras un periodo de inactividad, retomo la publicación de mis pequeñas memorias de papel con un cromo que me trae recuerdos de la infancia. No es el cromo en esta ocasión, que por el aspecto debe ser de los años 20, sino por la fabula que incluye, que recuerdo haberme aprendido de memoria en un libro de fábulas que me regalaron mis padres. El valor añadido del cromo es, sin duda, la ilustración con esa muerte digna de una Danza del Bosco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario