La última letra que me faltaba siempre fue una de las problemáticas por su parecido con la "y" - y aún hoy día a veces dudo con los subjuntivos del verbo haber y hallar... Aunque reconozco que la frase que nunca olvidaré fue la de Ahí hay un hombre que dice ay... Más de una lágrima costaba el llegar a dominar la ortografía y por ello, no en vano, el Llorón encabeza el cromo.
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